deliveryboy (segunda parte)

Ahora si, como prometi, aca publico la segunda parte de este relato, espero que produzca tantas pajas como yo al escribirlo ( esta es la cuarta vez que acabo, si es que lo hago).
Despues de haberme tragado esa delicia de leche de hombre, me desvesti un poco y otro poco me ayudo él. Ni lerdo ni perezozo, me sento en un sillon, se arrodillo en frente de mi, y comenzó a chuparme la pija como nuca nadie antes lo habia hecho. el seor mayor era todo un experto en chupar pijas. yo solamente me limite a disfutar y nada mas. yo pense que iba a seguir hasta tragarse toda mi leche, pero no.
El muy puto se bajo los pantalones, y como todo trolo chupavergas se sento sobre mi pija parada. Se quejo que le dolio, pero siguio cogiendose sin que yo le dijera palabra alguna. yo gemia como nunca, pues si bien no soy para nada afeminado, nunca antes la habia puesto, es decir, era virgen. Como era mi primera vez, me dedique a disfrutar de mi trasicion de virgen a buen hombre cogedor.
- AGGH AGH AGH AGH…. te gusta mi cola, eh? te gusta como me rompo el culo con tu verga? te gusta como encaja mi cullito en tu pija?
La verdad que si me gustaba mucho por que el hombre tenia el culito bastante apretadito (ahora lo puedo decir ya que actualmente tengo experiencia en el tema) y era mucho mejor que cogerme con la mano.
su mete y saca me excitaron tanto que no tarde mucho en acabar, y como a mi ya se me habian ido las ganas de seguir, y a el no se le araba, me vesti y me fui antes de que se me hiciera mas tarde para ir a trabajar. Pero antes de salir, le reclame el billete que me iba a dar de propina.
- La verdad que te engañe faci. pense que no ibas a caer.
-Caer en que? pregunte yo inocentemente.
- la verdad es que mi bolsillo derecho tiene un agugero en el interior de mi pantalon y fue ahi donde tenia el billete todo este tiempo.
Recibida la propna, me fui a trabajar. En todo los viajes, y durante, no paraba de pensar en ese extraño cuyo nombre no sabia, en un semaforo en rojo, aproveche para pajearme como todo hombre y no como todo pajero, y segui aun con el vehiculo marchando hasta llenar el suelo de leche, la que tube que limpiar con un trapo sucio para que mi jefe no se enterara.
Al día siguiente, otro pedido llego de la misma dirección del tipo que me habia iniciado. Con el interior lleno de alegria, fui ansioso por entregar ese pedido. Al golpear la puerta, me aiende el mismo tipo, pero esta vez en boxer y con su pija parada, al verla recorde la propina, y un enojo me invadio por que el billete tenia un valor de $2, pero por otro lado, senti alegria por que, si lo veo positivamente, la paga habia sido muy buena, y hoy recibiria otra paga.
no me dijo nada, pero yo entre desubicadamente y me tire entre sus brazos, y le di un buen beso en la boca provocandome una tremenda ereccion. Una vez adentro, sin pensarlo, le saque la unica prenda que lo vestia, me arrodille y comence a disfrutar ese manjar de reyes que tenia mi cuarenton preferido.
- asi de putita te queria mi bebe. hoy vas a recibir toda esta verga en tu cola y te voy a llenar los intestinosde lechita caliente.
yo segui disfrutando de mi trabajo y luego nos fundimos en un profundo 69 sobre la cama de 2 plasas en la que todas las noches duerme. era como un intercambio de favores, yo se la chupaba a el y el me la chupaba a mi, y con que ganas lo hacia. Repentinamente, paro de chuparmela y me quito su verga de mi boca, con toda brusquedad me dio vuelta y me la metio de una hasta el fondo, al principio dolio un poco, pero luego, sus envestidas ran como masajes para mi culo que chorreaba pequeñas gotitas de sangre.
- agh que lindo culo que tenes. esta bien apretadito y bien profundo.
yo podia sentir sus bolas chocando contra mi raya, y en un momento me confesoque le dolian ya que sus embestidas eran muy fuertes y aceleradas. Despues de un rato laro de meterme y sacarme su pija, nos colocamos en la posicion misionero apra poder sentirla mas profunda, para poder besarnos y para poder pajearme, y antes de acabar, me la saco para montarme como toda una puta. Estubomos un rato bastante largo cogiendo hasta que el acabo encima de mi abdomen, y yo lo hice dentro de su culo, ya que no queso que se la saque.
Despues de ese encuentro nos vimos un par de veces mas, despues de mi trabajo claro ya que me habian llamado 2 veces la atencion por no cumplir a horario. Luego se mudo de casa y nunca mas supe de él. Aunque estube averioguando un poco de su paradero y me ha contado que se mudo de ciudad. Si no me equivoco, Horacio (durante tantos encuentros tube la oportunidad de preguntarle su nombre) tiene alrededor de unos 54 años; y hoy decidi comentar este relato aprovechando que vino a mi memoria sin que yo lo deseara.
Espero que les haya gustado y por favor no dejen de comentar…